Videocolonoscopía
La colonoscopía le permite a su médico diagnosticar enfermedades o lesiones que afecten el interior del colon (que para su mejor estudio se divide o comprende en recto, sigmoides, descendente, transverso, ascendente y ciego) y tomar muestras de tejidos (biopsias) o como método inicial para otros tratamientos. En algunos casos puede también examinarse la parte final del intestino delgado, llamada ileon terminal a través de la válvula ileocal, por donde entran los restos alimentarios del intestino delgado al colon. Es conveniente que usted conozca las razones por las que se recomienda la colonoscopía, sus objetivos, alcances, limitaciones y los raros pero posibles riesgos y complicaciones para que tome una decisión más informada. Este formato tiene el objetivo de proporcionarle información general sobre el procedimiento y documentar los puntos más importantes. Usted podrá hablar con su médico y hacer las preguntas que considere pertinentes.
Su médico revisa la región externa del ano para detectar posibles enfermedades de esta zona, como hemorroides externas e inflamación, practica un tacto rectal que le puede permitir palpar la próstata, el cuello de la matriz, detectar masas que estén al alcance del dedo, para aplicar un lubricante (que puede tener anestésico local) y para examinar si hay en el guante sangre o materia fecal, sus características superficiales o, si son abundantes, recomendar una limpieza más exhaustiva del colon. Luego introduce un colonoscopio; una sonda flexible que tiene una cámara de video, una fuente para iluminar, un conducto para introdicur aire o agua y un conducto por donde se pueden introducir pequeños instrumentos o aspirar algunos residuos líquidos, en forma dirigida a través del ano, se revisa el colon, si es posible hasta el ciego.
La colonoscopía puede ser un examen incómodo, molesto o hasta doloroso ya que el médico introducirá aire en el colon para expandirlo y poder observar mejor y llevar a cabo maniobras para pasar el endoscopio hasta la región deseada. Regularmente se le coloca un suero en una vena por donde se le pueden administrar líquidos, un sedante que le mantenga tranquilo, relajado, adormecido y analgésicos potentes para evitar que usted tenga dolor. Algunas veces se usa un antiespasmódico, para disminuir los movimientos del colon y poder observarlo mejor.
Para su mayor seguridad se podrán monitorizar sus signos vitales como el pulso, la presión arterial y la oxigenación de la sangre para detectar y tratar de inmediato alteraciones del corazón o respiratorias. También se puede administrar oxígeno por unos tubitos junto a la nariz o por una mascarilla. En algunos casos, especialmente si hay condiciones o riesgos mayores a lo habitual, la sedación-analgesia las podrá hacer un anestesiólogo, que podría administrar anestesia endovenosa o en algunos casos, darle anestesia general a través de un tubo de plástico por la tráquea, para asegurar su respiración o ventilación o para proteger las vías respiratorias de flemas o líquidos provenientes del estómago.
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